En ese constante evolucionar, hemos pasado por muchísimas experiencias, hemos cambiado tanto física como espiritualmente y hasta hemos modificado nuestro pensamiento sobre las cosas. Une tu pensamiento, tu palabra y acción en una misma dirección, y te sentirás libre.
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jueves, 20 de septiembre de 2012
El Narciso es una planta muy bella, pero que huele muy mal. ヅ
“Narciso era un joven de gran belleza a quien todos admiraban. Pero él, lleno de vanidad y orgullo despreciaba y rechazaba a todos sus amantes, tanto mujeres como hombres. La ninfa Echo estaba perdidamente enamorada de él, y cuando Narciso la rechazó ella se consumió en su dolor hasta quedar transformada en una simple voz. Un muchacho a quien Narciso había despreciado del mismo modo, rezó a los dioses para pedirles que se amara a sí mismo sin descanso. La diosa Némesis escuchó sus ruegos e hizo que Narciso se parase a beber en un manantial en la cima del monte Helicón. Cuando vio su propia imagen reflejada en el agua se enamoró al instante de ella, pero no podía abrazarla porque cada vez que lo intentaba la imagen se desvanecía con el movimiento ondulante de las aguas. Incapaz de dejar de contemplarse, se quedó allí hasta que murió de hambre. Pero no fue su cuerpo lo que permaneció, ya que en su lugar apareció una flor.”
El mito del Narciso tiene varias versiones, pero siempre trata de ese hermoso joven que se enamora de sí mismo; producto de una maldición, o por la imposición de amar a otra persona. Esta leyenda del Narciso, dio origen a la expresión “NARCISISMO”, por el amor desmesurado hacia uno mismo.
El narcisista se cree enormemente importante, considerándose por encima de cualquier persona, incluida su pareja o amistades. El narcisista se presenta como una persona extremadamente segura, irradian una imagen de seguridad en sí mismos, incluso con una personalidad avasallante, y pueden ser capaces de convencer a otros de que no hay nadie mejor que ellos, y en el fondo, detrás de ese enorme ego, ocultan un gran vacío, una falta de autoestima increíble y una inmadurez emocional.
Al crear ese ego falso, el narciso necesita demostrar continuamente dicha superioridad a través de la aprobación y los elogios de los demás, ya que es el único modo que tiene de verla confirmada. Es como si no llegara a creerse del todo esa grandiosidad que trata de transmitir.
Tienen una gran necesidad de sentirse aprobados, admirados y adulados por los demás, quienes, sin duda alguna, tienen que “saber lo maravillosos que son”. Sienten que merecen una gran admiración y respeto por parte de los demás, de quienes esperan que deseen de buena gana satisfacer todos sus deseos y darles un trato especial. Les gusta ser el centro de atención y conversación.
Los narcisos esconden su verdadera cara con un manto de magnetismo personal, hacen favores, grandes regalos, son chistosos ylucen brillantes hasta que te dominan, entonces allí te mostraran su verdadera personalidad. "Son el vampiro perfecto, te seducen antes de mostrar los colmillos".
El narciso no es capaz de ponerse en los zapatos del otro y compartir sus sentimientos. Puede sentirse ofendido si un amigo dice algo que vaya en contra de su manera de pensar. Tienen estallidos de rabia frecuentes debido a su hipersensibilidad ante cualquier ofensa real o imaginada. Tienden a ver malas intenciones en las acciones de los demás. Debajo de esas rabias tienden a ocultar tristeza, vergüenza o desesperación. Se muestran insensibles y desconfían de los motivos de los demás.
El Narciso tiene una imagen tan pobre de sí mismo, que la compensa sobrevalorándola artificialmente. Siempre van a negar quienes realmente son y adoran a la imagen sobrevalorada que tienen de sí mismos. Niegan sus sentimientos de depresión, problemas y cualquier trauma que hayan podido sufrir a lo largo de su vida.
El narciso, envidia a los demás y cree que los otros son envidiosos también. Se sienten mal cuando otros alcanzan algún logro que ellos antes hayan alcanzado, viendo aumentada su competencia auto impuesta y disminuyendo su sentimiento de grandiosidad. Al mismo tiempo envidian a las personas que tienen capacidad de empatía de los cuales ellos carecen espontáneamente y más si aquellos son emocionalmente accesibles; ya que ellos son reacios a reconocer o identificarse con los sentimientos y necesidades de los demás.
La persona narcisista se siente ofendida con facilidad, reacciona con rabia e ira cuando la critican, tratando de destruir de cualquier modo a esa persona, para demostrar que ella siempre tiene la razón y así poder recuperar sus sentimientos de crédito personal.
En el área laboral, no toleran que sus propuestas sean rechazadas y a que es posible que no se molesten en mejorar y aprender cosas nuevas porque piensan que ya lo saben todo. Buscan el triunfo por el triunfo mismo. No toleran el fracaso y esto puede llevarlos a veces a no arriesgarse llegando a ser capaces de tomar ideas de otros y hacerlas propias sin la más mínima consideración moral ni ética.
Cuando el Narciso se siente "aventajado" de alguna manera, pensando que los demás están ahí para satisfacer sus necesidades, no dudan en manipularlos y en tratarlos como objetos que le sirven para lograr sus objetivos.
Siempre van a exageran sus éxitos y se atribuyen mayores habilidades que los demás al conseguirlos, mientras que atribuyen los fracasos a circunstancias externas.
“Narciso” está atrapado en un círculo vicioso, originado de una falla vincular, donde el lazo materno-filial no se ató. La maldición expresada en “Ovidio” le impide alcanzar lo que desea: Obtenerse a sí mismo… para poder amarse…. porque, el objeto de su amor es la imagen que ha hecho de sí y no su verdadero “ser”.
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